En la inmensidad azul del Atlántico, la naturaleza ha creado una tierra repleta de belleza, el archipiélago de las Azores. Formando parte del conjunto volcánico de la Macaronesia, sus singularidades geológicas, con más de ciento veinte geo-sitios clasificados, hacen de sus paisajes algo único en el mundo. En este viaje vamos a conocer dos de las nueve islas del archipiélago: San Miguel, la mayor, la más montañosa y la de mayor actividad volcánica, y la isla de San Jorge, con sus pastos de un inmenso verde que termina en abruptos acantilados.
Sus caldeiras o grandes cráteres ocupados por lagos y sus altas montañas hacen de esta isla un paraíso para el senderista. La mayor de las islas portuguesas acoge a la mitad de los azoreños y es donde se concentran los servicios más importantes de las Azores, desde la Universidad a las sedes principales del Gobierno regional y, como curiosidad, las únicas plantaciones de piña y té de Europa.
El verde, el inmenso verde que cubre valles y montes, en una infinita profusión de tonalidades, y el ganado paciendo por sus ricos pastizales, hacen que esta isla se la considere la Suiza de las Azores. Un gigantesco navío eternamente anclado en el mar, de 65 km de largo y apenas 5 km de ancho, cortado a cuchillo por acantilados de cientos de metros de altura y famoso, entre otras bellezas, por las singulares fajas o fajanas, pequeñas planicies junto al mar originadas por el corrimiento de lava o de tierra, donde coexisten poblaciones y cultivos.
Vuelo a la isla de San Miguel y traslado al hotel en Ponta Delgada.
Por la mañana tomaremos un vuelo interno que nos llevará hasta la isla de San Jorge. Nos trasladaremos a nuestro alojamiento y a continuación realizaremos una ruta por la faja de Joao Dias, una de las más famosas de la isla.
Probablemente la faja más famosa de la isla de San Jorge. Tomaremos como punto de inicio la parte alta de los acantilados de Cubres para seguir una senda que nos llevará entre magnífica vegetación de lausilva, arbustos de hortensias e incluso algunos dragos por la ladera de un bonito acantilado hasta llegar a la faja dos Cubres, situada junto al mar, en la que destaca un pequeño lago cristalino entre la montaña y el oleaje. Plantaciones de café, plataneras y piñas contrastan asimismo con el telón oceánico y hacen de este lugar uno de los más bellos de la isla.
Hoy ascenderemos al Pico da Esperança que, con sus más de mil metros de altitud, hace de perfecto mirador sobre la cadena volcánica central de la isla de San Jorge, siendo también su máxima altura. Como las cuentas de un rosario gigante, las sucesivas erupciones que ha sufrido la isla han alineado un eje montañoso de gran precisión y belleza. En nuestra ruta podremos disfrutar de un auténtico “collage” de paisajes con infinidad de tonos verdosos, además de azaleas y bosquetes de hortensias alrededor de los pastizales repletos de rebaños. Después de la excursión, si el horario y el clima lo permiten, nos acercaremos a disfrutar de la piscina natural de Simao Dias, en la faja de Ouvidor.
Empezaremos nuestra última ruta en San Jorge junto a la ermita de Santo Antonio, en la zona norte de la isla. Tras escasos metros aparecerá ante nosotros un magnífico mirador sobre la faja que vamos a recorrer. Seguiremos un perfecto camino con sucesivos escalones de piedra por los que descenderemos hasta las casas de Além, un poblado de pescadores de la provincia de Norte Grande, donde, hasta hace muy poco tiempo, solo se podía llegar andando o en barco, sin lugar a dudas uno de los rincones más singulares de la isla.
Pronto por la mañana regresaremos a la isla de San Miguel, donde visitaremos el mayor recurso hídrico de agua dulce del archipiélago, el paradisíaco enclave conocido como la Caldeira das Sete Cidades, una impresionante caldera de 12 km de perímetro y 7 km de diámetro que se formó por el colapso de un cráter durante una gran erupción en tiempos prehistóricos, aunque su forma actual se debe a la terrible erupción de 1445. Cuenta la leyenda que siete ciudades que fueron fundadas por obispos españoles, posteriormente expulsados, se hundieron en el lugar hoy ocupa la caldera.
Hoy nos desplazaremos hasta el pequeño municipio costero de Praia, en la costa sur de la isla, pudiendo disfrutar por el camino de una gran variedad de paisajes. Esta ruta en la isla de San Miguel nos llevará a conocer uno de los rincones más pintorescos de las Azores, la Lagoa do Fogo. Por la tarde, si el clima y el horario lo permiten, dispondremos de tiempo libre para darnos un refrescante baño en su piscina natural.
Hoy ascenderemos a la montaña más alta de la isla de San Miguel, el Pico da Vara (1103 m), situado en el este de la isla. En nuestro recorrido disfrutaremos de un bonito bosque húmedo de laurisilva y cedros hasta alcanzar el cordal principal por el que llegaremos a la cumbre, donde tendremos una magnífica panorámica, en especial sobre la costa sur de la isla. De vuelta a Ponta Delgada visitaremos el lago de las Furnas, con su espectacular actividad volcánica y su rica y diversa flora.