Al noroeste de la ciudad olímpica de Lillehammer se encuentra la ruta Peer Gynt Trail, que lleva el nombre de un personaje de ficción muy querido en Noruega, fruto de la imaginación del escritor Henrik Ibsen. La travesía, de 80 km de longitud, transcurre íntegramente por pistas preparadas (pisadas por máquina) tanto para estilo clásico como para patinador, entre los dominios nórdicos de Espedalen y Skeikampen, en lo que se conoce como el «País de Peer Gynt».
La ruta, dividida en cuatro etapas, es una excelente introducción a las travesías nórdicas, apta para cualquier persona que domine las técnicas básicas del esquí de fondo.
La travesía recorre un paisaje de horizontes lejanos, bosques de abedules, granjas tradicionales y lagos helados; con tiempo despejado, se puede disfrutar de una vista continua de los impresionantes picos de los parques nacionales de Jotunheimen, Rondane y Dovrefjell a lo largo del trayecto, lo que proporciona un hermoso y evocador telón de fondo a esta sencilla región montañas sinuosas.
En lugar de cambiar de alojamiento en cada etapa, pernoctaremos siempre en el mismo; para ello hemos elegido un histórico hotel donde antaño se emplazó la Granja Hundrop, en la que vivió en el siglo XII el poderoso personaje histórico Dale-Gudbrand. Su centrada ubicación nos permitirá llegar facilmente con nuestra furgoneta a los inicios de etapa en Espedalen, Fefor, Gålå y Skeikampen.
La travesía puede hacerse tanto en estilo clásico como en patinador, y si eres de los que devoran kilómetros, tendrás la opción de hacer las etapas en formato de ida y vuelta, doblando el kilometraje original, acompañado de uno de los guías, que se ocupará de recuperar la furgoneta. Por otra parte, al final de las etapas (en particular de las dos primeras, que son las más cortas) es posible seguir esquiando unos kilómetros más por cualquiera de los innumerables circuitos que existen en la zona.
Y para finalizar los extras a la Peer Gynt, como preparación a la travesía, esquiaremos en el área de Venabu, situado al sur del Parque Nacional de Rondane; actvidad que podremos repetir el día de regreso, dependiendo del horario de vuelos de los participantes.
Traslado por carretera a Sør-Fron (225 km, 3 horas) donde se encuentra nuestro alojamiento, un precioso hotel histórico construido en madera.
Antes de comenzar nuestra travesía, dedicaremos esta jornada a practicar nuestro esquí en la cómodas y extensas pistas de Venabu, una región de las montañas de Rondane muy cercana a nuestro alojamiento.
Nos trasladamos a Espedalen para comenzar nuestra travesía en cuatro etapas, bajo la mirada del Pico Ruten, con el objetivo puesto en Fefor, un aislado hotel de montaña, único punto habitado en muchos kilómetros a la redonda y un encantador rincón con sabor clásico, de gran tradición en la región, donde podremos tomar algo caliente.
Tras la etapa regresaremos a nuestro hotel.
Regresamos a Fefor para continuar nuestra travesía. Gala, nuestro destino de hoy, tiene una gran tradición entre los fondistas locales y ocupa un lugar central de los dominios esquiables al sur del valle de Gudbrands.
Siendo hoy la etapa más corta de la travesía, los participantes que quieran hacer más kilómetros podrán hacer juanto al guía cualquiera de los innumerables bucles que existen en el área de Gala.
Tras la etapa regresaremos a nuestro hotel.
La etapa reina de la travesía tiene todo lo que se puede esperar de una travesía nórdica; un desafío de 28 km a través de parajes espectaculares, con un gran descenso final hasta Kvitfjell.
La etapa final tiene la particularidad de que deberemos remontar parte del descenso de ayer, hasta el cruce que nos conduce a Skeikampen, destino de la etapa y final de la travesía, que además es una de nuestras zonas preferidas de Noruega.
Dependiendo del horario de regreso de los vuelos de los participantes, podríamos esquiar de nuevo en Venabu hasta medio día, antes de trasladarnos al aeropuerto de Oslo para tomar el vuelo de regreso.