Con sus 230 km de recorrido, el Valle de Gudbrands es un eje fundamental del sudeste de Noruega. El valle comienza en la ciudad olímpica de Lillehammer (un destino clásico del esquí de fondo) y a medida que avanza hacia el norte, el valle nos lleva hacia varios parques nacionales llenos de naturaleza virgen, entre los que destacan Rondane y Jotunheimen. Granjas e iglesias centenarias construidas en madera nos muestran que estamos en uno de los lugares con más historia del país.
Para explorar esta interesante región hemos elegido un histórico hotel de situado en Sør-Fron, en el curso medio del valle y donde antaño se emplazó la Granja Hundrop, en la que vivió en el siglo XII el poderoso personaje Dale-Gudbrand. Esta ubicación nos permitirá disfrutar de los estupendos dominios de Gålå, Fefor, Skåbu y Espedalen, situados al este de Jotunheimen, y Venabu y Rondablikk, situados al sur del Parque Nacional de Rondane.
En definitiva, este es sin duda el viaje más variado en cuanto a paisaje y diversidad de zonas de cuantos hacemos en Noruega.
Traslado por carretera a Sør-Fron (225 km, 3 horas) donde se encuentra nuestro alojamiento, un precioso hotel histórico construido en madera.
Con algunas de sus pistas preparadas a partir del 1 de noviembre, Gala tiene una gran tradición entre los fondistas locales y ocupa un lugar central de los dominios esquiables al sur del valle de Gudbrands. Desde el Peer Gynt Café, junto al lago Galavalnet, tenemos a nuestra disposición varios recorridos circulares entre los 15 y 25 km.
Las pistas de Espedalen recorren un paisaje espectacular que va desde bosques de pinos en el valle, hasta impresionantes terrenos montañosos con el pico Ruten a 1.500 m.
Primera incursión en la vertiente norte del valle de Gudbrands. En la población de Kvam tomaremos la carretera que en dirección norte va en busca del Parque Nacional Rondane, a cuyas puertas se enecuentra el dominio nórdico de Rondablikk, nuestro destino de hoy.
Fefor es un pequeño dominio de unos 100 km alrededor del lago y del hotel del mismo nombre, inicio de todas las rutas y único punto habitado en muchos kilómetros a la redonda. Un encantador rincón con sabor clásico, de gran tradición en la región.
Venabu es el segundo acceso meridional a las montañas de Rondane. Al igual que Rondablikk, aquí es muy relativo hablar de kilómetros esquiables, pues partiendo de cualquiera de ellas, hay 2.500 km de pistas interconectadas que abarcan gran parte de la zona oriental de Noruega.
Skabu es el dominio más occidental que visitaremos en este viaje y por tanto, el más cercano a las montañas de Jotunheimen, telón de fondo de la mayor parte de los recorridos.