Piamonte y Gran Paradiso

Al norte del Monte Viso, la Riserva Speciale Pian del Re protege un área de especial atractivo por la presencia de varios lagos alpinos. Esta ruta parte del Pian della Regina y alcanza el Pian del Re, donde se encuentra el refugio de montaña del mismo nombre y donde las aguas del Po inician su viaje de 650 km hasta el Adriático. En medio de un sugerente paisaje de alta montaña llegaremos al Lago de Fiorenza, bajo las altivas paredes del Monte Viso.
Si las condiciones fueran favorables, la ruta puede continuarse un par de kilómetros hasta el Colleto sul Vallone dei Quarti, añadiendo unos 150 m de desnivel.

Más allá de Ceres, donde termina el tren, se encuentra Balme, el pueblo más elevado de la Val d’Ala. Balme, literalmente rodeada de una muralla rocosa es famosa por sus guías de montaña y en concreto por uno de ellos, Antonio Castagneri, que realizó numerosas primeras ascensiones en el siglo XIX. Acostumbrados a cruzar glaciares y escalar montañas cargados de mercancías que transportaban entre Francia e Italia, los mozos de Balme abrazaron la nueva profesión de guía con gran entusiasmo.
Esta ruta comienza en el Pian de la Mussa, donde termina la carretera, y se eleva por un sendero muy panorámico hasta el Pian della Ciamarella.

Este es uno de los itinerarios clásicos del Valle del Orco. Partiendo del precioso lago de Ceresole el sendero va ganado altura entre el bosque hasta alcanzar el refugio Jervis, antigua caserna militar enclavada en el precioso entorno del Pian del Nel y que servía a las tropas que vigilaban la cercana frontera con Francia del paso Nivolet. El descenso lo haremos por otro sendero completando una bella ruta semicircular.

Partiremos desde el Pont de Savaranche en una ascensión corta que nos va a llevar al principio a la orilla del torrente Savara hasta alcanzar el refugio de Tetras Lyre, a partir de aquí comienza la subida progresiva con el Torrente de Chante a nuestra derecha hasta alcanzar el refugio Vittorio Emanuelle (2.735 m).

La ruta forma parte de la via Francigena y comienza en el pueblo de San Ambrogio di Torino situado en el valle de Susa, llegando hasta la abadía de Sacra de San Michele. La via Francigena es una ruta de peregrinación que comienza en la ciudad inglesa de Canterbury y finaliza en Roma, concretamente en la plaza de San Pedro de la Ciudad del Vaticano. La primera referencia que se tiene de ella es del siglo X.

La ruta de hoy transita sobre un camino en el Valle del Po por el que durante siglos se intercambiaron todo tipo de mercancías como vino, arroz, aceite de nuez y sobretodo, sal, entre Ristolas, en la región francesa del Delfinado, y el Marquesado de Saluzzo. A tal punto fue importante el comercio que en el siglo XV se construyó el primer túnel de los Alpes, el Buco di Viso. El tramo de la Via del Sale que nos ocupa hoy, se desarrolla, sin embargo, por un terreno mucho más placentero: los preciosos bosques de hayas y otras frondosas que cubren el Alto Valle del Po. Desde el pueblo de Crissolo se eleva sobre el valle lentamente hasta la ermita de San Giacomo y se encamina después hacia la localidad de Oncino, pueblo colgado sobre un valle lateral del Po. Tras una pausa en la bonita plaza del pueblo seguimos descendiendo hasta volver a encontrarnos junto al río Po, que ya no abandonaremos hasta llegar al pueblo de Calcinare, final de la ruta.