Comienza el camino en progresivo descenso por las laderas de la Pania di Corfino, cerca de uno de los parques botánicos de montaña mejor conservados de Italia. Seguidamente, nos dirigiremos hasta la famosa Fuente del Amor. Situada en medio de un bosque de hayas donde apenas entran los rayos de sol, los reflejos que se suceden entre la hojarasca y las ramas de las hayas, hacen de este bosque de hadas un lugar de gran belleza. Continuaremos el camino hasta alcanzar la Pania de Corfino desde donde podremos observar la majestuosidad de los Alpes Apuanos.
Dejaremos atrás el pueblo de Equiterme siguiendo este viejo camino que transita por la umbría del valle de Garnerone entre frondosos bosques de castaños hasta alcanzar los Altos del Castellacio, desde donde podremos divisar el bello pueblo de Monzone, en el fondo del valle del río Lucido. A partir de aquí, seguiremos por un camino que entre bosques de boj y zonas kársticas nos llevará hasta el pueblo de Vinca. Si las fuerzas acompañan podremos prolongar la excursión y subir hasta la Ermita de S. Giorgio desde donde podremos disfrutar de una preciosa panorámica del Valle Lucido.
El camino es un continuo sube y baja en plena vegetación mediterránea y con campos de cultivo aterrazados que han modelado las laderas, en un equilibrio excelente entre la naturaleza y el hombre. En el recorrido pasaremos por Vernazza, Corniglia, Manarola y Riomaggiore, pueblos de agricultores y al mismo tiempo de marineros, con su simplicidad, sus casas y barcos coloreados, así como sus estrechas calles.